La vida después del aislamiento de COVID-19

Han pasado casi dos años desde que toda la comunidad internacional tuvo que estar en un resguardo donde no se llevaron a cabo nuestras actividades cotidianas e incluso dejamos de ver a nuestros seres queridos. Sin duda alguna, fue un cambio que enfrentamos todos los habitantes de la tierra y que cambió nuestra perspectiva de cómo lidiar con este nuevo tipo de situaciones.

Hoy en día, muchas personas se han podido adaptar de nueva cuenta sin miedo a contagiarse o, por la misma necesidad de tener que ir al trabajo, se han visto en la necesidad de adaptarse. Sin embargo, hay muchas otras personas que hasta hoy en día el pensar en salir de su casa les genera miedo, ansiedad y/o paranoia.

De hecho, de acuerdo a los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), las tasas de trastornos de salud emocional y conductual, como la depresión, la ansiedad, el consumo de sustancias, la violencia familiar y los pensamientos suicidas, han aumentado desde principios de 2020.

Cómo continuar con nuestra vida después del aislamiento si sentimos miedo o ansiedad

El cuerpo humano siempre necesita defensas para contrarrestar cierto tipo de enfermedades, por lo que es recomendable salir sin miedo a contagiarnos. Eventualmente, puede que nos contagiemos; sin embargo, para entonces nuestro cuerpo habrá generado anticuerpos que nos pueden ayudar para futuros contagios no solo de COVID-19 sino de cualquier otro tipo de enfermedad. Hay estudios que comprueban que los efectos de la vacuna reducen considerablemente los síntomas y riesgos que este virus genera.

En general, es importante fortalecer tu cuerpo y mente, ya que el cuerpo es nuestro templo de vida, es el que nos permite realizar todas las actividades que nos gustan y que nos mantienen en paz y contentos.

Por ello es importante mantener una dieta saludable, trata de hacer alguna actividad física que te guste, busca aprender algo nuevo, lleva a cabo ese reto que no te has atrevido a hacer, duerme a tus horas y descansa lo suficiente. 

Pero, sobre todas las cosas, sé paciente y compasivo con tus emociones. Al momento de ir a descansar, toma unos minutos y piensa que algunas personas no pueden regresar a sus actividades cotidianas de inmediato, pero buscan pequeños cambios en su rutina para hacerlo.

Por ejemplo, si aún te sigue causando ansiedad salir al supermercado porque en el trayecto pueden suceder muchas cosas, empieza con salidas cercanas, sal a caminar dos o tres cuadras, usa tu mascarilla y lleva contigo tu desinfectante, y diariamente agrega una cuadra más a tu caminata. Cuando menos lo esperes, ya habrás llegado al supermercado. 

Si tienes carro, ve al supermercado en horarios en los que normalmente no se encuentra lleno y siempre lleva contigo tus desinfectantes y toma tus medidas. No tengas miedo a ser juzgado, la gente también ha aprendido a ser comprensiva en ese aspecto, pero tú también deberás ser consciente de que las demás personas pueden manejar las cosas de forma diferente. Intenta retomar las actividades que solías hacer, si te es difícil, siempre busca horarios en los cuales consideres que los lugares están más vacíos.

Por otro lado, recuerda que como ser humano también tenemos que tener contacto con otras personas, es importante compartir tus emociones con tu gente y expresarles cómo te sientes al respecto.

Tus amigos y familia siempre estarán para apoyarte si es necesario. Si aún no te sientes cómodo saliendo de casa, puedes organizar actividades con tus amigos y/o familia. Puedes organizar reuniones con 1 o 2 personas en tu casa y poco a poco incrementar el número de personas; es importante también interactuar con ellos en persona y no solo a través de una pantalla.

Podrías organizar una noche de juegos de mesa, noche de películas o una cena casual. De igual forma, también puedes hacerlo de manera remota a través de videollamadas; sin embargo, abre tu mente y date la oportunidad de ver a tus seres queridos de nueva cuenta para no sentirte desplazado en caso de que ellos sigan conviviendo aunque tú no vayas a los planes.

Siempre es bueno mantener el contacto y tener cerca a tus seres queridos, no dejes que emociones negativas te aparten de todos los momentos de la vida que en un futuro vas a querer recordar.

Por otra parte, ten en cuenta que la salud mental es un factor importante, si en verdad sientes que has probado de todo y nada soluciona esto, te recomendamos que busques ayuda profesional. Muchas personas pueden tener distintas emociones al sobrevivir y sobrellevar cualquier tema relacionado con COVID-19. Algunas personas experimentan tristeza, preocupación, cambios en el apetito, dificultad para concentrarse, entre otros síntomas.

Si estás experimentando más dificultades al momento de intentar realizar tus actividades cotidianas, o notas más irritabilidad o experimentas conflictos con tus seres queridos, no dudes en buscar ayuda, intenta acercarte con tu tutor de la escuela, con algún departamento encargado para la ayuda de este tipo o incluso contactar a tu seguro médico para verificar si tu plan cuenta con beneficios de salud mental que puedas utilizar para tratar este tema. 

La pandemia trajo consigo muchos cambios en la vida de las personas y, hasta hoy en día, cada uno de nosotres buscamos la forma de entendernos y adaptarnos a todo ello. Recuerda que la vida se vive una vez y hay que tratar de vivirla de la mejor manera posible.

Fuentes:

https://www.cdc.gov/populationhealth/well-being/spanish/bienestar-emocional.htm

https://covidblog.oregon.gov/platicas-de-salud-con-oha-la-ansiedad-o-incertidumbre-por-el-levantamiento-del-cubrebocas/

https://magazine.medlineplus.gov/es/art%C3%ADculo/4-estrategias-para-afrontar-el-estres-de-la-pandemia

https://www.tec.ac.cr/hoyeneltec/2020/10/28/estrategias-recuperar-replantear-suenos-2021-primera-parte
https://newsnetwork.mayoclinic.org/es/2020/09/02/duelo-en-tiempos-de-coronavirus-como-lidiar-con-la-perdida-de-rutina-durante-la-pandemia/



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